Me parecía difícil el tema de chequear el tiempo. Sinceramente creía que era poner en riesgo la visita porque el cliente me podría decir: si no vino con tiempo ¿entonces a que vino?
Sin embargo recordé que en el entrenamiento se hizo mucho énfasis en la necesidad de chequear “siempre” el tiempo y además se nos dijo que el sistema estaba aprobado y daba resultado.
Decidí creer y en una visita que hice a una fábrica decidí aplicar el 100% de los pasos de la visita.
No había avanzado mucho la visita, estaba apenas en el tema del saludo corporativo y decidí chequear el tiempo con un operario que, como siempre, supuse cuando lo vi que no tenía prácticamente nada de tiempo. Cuando le dije: tengo algo muy importante para contarte sobre la seguridad de tu futuro y de tu familia, ¿tienes 20 minutos disponibles para que hablemos? El operario APAGÓ la máquina y me dijo: claro, para eso tan importante debo tenerlo.
Me quedé estupefacto. Nunca lo hubiera creído si no lo hubiera hecho. Es por eso que invito a mis compañeros para que hagan no solamente el chequeo del tiempo sino todos los pasos de la visita.
Entrenador: Luis Bernardo Velez